Post date: julio 02, 2017 | Category: Latest Headlines
ARTÍCULO
RESUMEN
La construcción es de las actividades más contaminantes pues emite el *95% de los gases de efecto invernadero dentro de la industria manufacturera, principalmente debido a la producción de cemento. Por otro lado, el ladrillo rojo, común en nuestro país contamina el equivalente al CO2 liberado por un automóvil a gasolina en un trayecto de 11 kilómetros por pieza producida.
Se compararon las propiedades de un block de concreto y otros ecológicos como el adobe y la construcción con pacas de paja contra el de paja-arcilla, para determinar las ventajas de este sistema constructivo en un elemento básico como el block, se realizaron experimentos para la creación de un material que cumpla con los estándares constructivos.
Se trata de un material nuevo en la industria, pero con fundamentos en la construcción artesanal; un material natural y ecológico con bajo impacto ambiental que incorpore la construcción natural a los sistemas constructivos estandarizados.
Introducción
La Industria de la manufactura y la construcción es de las categorías con más emisiones de gases de efecto invernadero, ocupando hasta el año 2010 el 7.5% general y el 11.3% como concepto en la categoría de energía que representa a su vez el 98.4% de la emisión de de CO2 total como país; categoría en la cual el 47.5% es debido a la producción creciente de cemento según el Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero (2013).
La construcción en México se está volviendo insustentable, esto sin contar la ocupación de área de cultivo por el cambio de uso de suelo, más otros contaminantes y consecuencias que tiene la construcción estandarizada como lo es la lenta incorporación de los residuos: “Escombros de Obra”
Una alternativa a ello es recurrir a lo que veníamos haciendo generación tras generación, la bioconstrucción como una alternativa que a través de técnicas constructivas naturales y la incorporación de nuevas tecnologías nos acerquen a una vivienda digna con materiales económicos y accesibles.
La construcción natural o bioconstrucción, como lo define Suárez (2010) y Ordoñez (2012), es un método ancestral que ha sido y sigue siendo parte de la cultura de los pueblos desde hace miles de años, generación tras generación, y en todo el mundo, desarrollando técnicas de edificación utilizando los elementos tal cual se encuentran en la naturaleza, sin embargo, en la actualidad este conocimiento se va perdiendo pues deja de trascender cuando se adoptan los nuevos sistemas estandarizados de construcción.
Keywords: Encofrado, block ecológico, sistema aligerado, construcción natural.
Si se habla de construcción natural en México, fácilmente se relaciona con construcciones de tierra, pues es una vinculación cultural permanente ya que hasta el día de hoy podemos apreciar esta tipología de construcciones en el centro de las principales ciudades de nuestro país; así mismo, la construcción en tierra cruda es uno de los recursos típicos y tradicionales del hombre en sociedad alrededor del mundo, y ha sido, la manera en la que nuestros antepasados resolvieron el problema habitacional de manera sustentable, económica, pero sobre todo en equilibrio con el entorno.( González et al. ,2003).
Algunos resultados de investigaciones demuestran estadísticamente que una tercera parte de la población mundial y la mitad de la población de países que se encuentran en vías de desarrollo viven en construcciones de tierra, ya sea en pequeñas comunidades, aldeas o ciudades (Figura 1); por lo que se podría considerar que la construcción natural es la más común en la edificación a nivel mundial (Akinwumi, Awoyera, & Bello, 2015); sin embargo en nuestro país sólo se ha registrado un 6.1% del total de viviendas según el censo de población y vivienda para el año 2010 número que disminuye en gran medida tomando en Algo que no se está considerando y erróneamente la industria de la construcción ha dejado a un lado (cambiando el barro por acero y concreto) es que los materiales utilizados en la bioconstrucción son en su mayoría de muy bajo costo económico y mucho más importante el costo ambiental (Vega, et al. 2011), ya que estos se pueden encontrar casi en cualquier lugar eliminando en gran medida el costo de obra por las cantidades irracionales de kilómetros que tienen que viajar los materiales estandarizados y que repercute en toneladas de CO2 y otros contaminantes que están llevando al límite la conservación del medio ambiente, y por ende, nuestra calidad de vida. En cambio, las técnicas constructivas utilizadas en la construcción natural o “ecotecnias” como se les han nombrado en el gremio de la bioarquitectura y la bioconstrucción se consideran técnicas tropicalizadas, ecológicas, amigables con el medio ambiente y de muy bajo consumo energético. (Sameh, 2014).cuenta que el resultado del censo para el año 2000 fue del 11% (INEGI, 2000, 2010).
Tabla 1, XII Censo General de población y vivienda
Es entonces cuando se pone sobre la mesa el tema de discusión: ¿a dónde se está dirigiendo el desarrollo tecnológico si se habla de la industria de la construcción?; si hablamos de condiciones térmicas además de otros factores, como lo señala Raymundo Rodriguez Filho (2007), podemos destacar la superioridad del confort térmico obtenido en construcciones en tierra cruda que distinto de los materiales convencionales, mantienen temperaturas internas entre 20 y 25°C todo el año, independiente de las temperaturas externas.
La termicidad es tan solo una de las muchas cualidades que tienen las construcciones elaboradas con materiales naturales además de su capacidad de biodegradarse por la composición de los materiales, por ello, es que existe una necesidad inminente de desarrollar tecnología que verdaderamente mejore la manera en que habitamos contribuyendo a una mejor calidad de vida.
Como material, el barro se ha caracterizado por ser maleable y es por ello que tanto nuestros ancestros como en la actualidad es utilizado de muchas formas aplicando diferentes técnicas según el clima, terreno y otros recursos naturales con que se cuente.
En nuestro país, la tecnología actual ha permitido a los bioconstructores volver a edificar con sistemas constructivos ancestrales invitando a la gente a recurrir a estas técnicas con tecnologías actuales y así poder realizar la autoconstrucción con resultado de una vivienda digna, económica, confortable, y que además procure la conservación del medio ambiente y ahorro energético. Algunas de estas tecnologías aplicadas actualmente son:
Encofrado: Sistema constructivo a base de cimbras contenedoras que crean la forma final de un muro que se construye mediante fibras naturales mezcladas con mortero natural, de tal forma que al secar crean un muro auto portante utilizado en estructuras divisorias en cualquier tipo de espacio
Tapial: Sistema constructivo muy parecido al encofrado, con la diferencia de la utilización del barro seco (clay) como único componente, sin la necesidad de incorporar aglutinantes, resinas o aditivos logrando un acabado en capas de tierra. Esta tecnología es una imitación de la compactación natural formada por la naturaleza (tepetate) con los cuales se obtienen bloques que conocemos comúnmente como “sillar”.
COB: Uno de los sistemas constructivos más utilizados en la construcción natural. Sus componentes se pueden encontrar casi en cualquier terreno, entre los que destacan fibras naturales como el zacate y la cebada, arena y barro. Esta ecotecnia se aplica directo en el sitio donde se realiza la obra o para elaborar prefabricados en block o panel.
Bahareque o Quincha: Sistema constructivo natural en el cual se levantan estructuras autoportantes con elementos rígidos de la zona como la madera, el carrizo, el bambú, etc. Estos se repellan con una mezcla muy parecida al COB contenida con alguna fibra natural similar a la paja y aglutinada con barro.
Plaster/final plaster: Sistemas de estucos o aplanados naturales que da acabados aparentes a sistemas de construcción natural in situ o prefabricados. Sus componentes son finos y se mezclan con resinas naturales tales como engrudos, de harina de trigo, baba de nopal, cera de abeja, aceite de linaza, etc.
Tadelack: Sistema de impermeabilización natural para proteger los diversos sistemas constructivos naturales, sobre todo para acabados en espacios donde la humedad es una constante.
Súper Adobe: Sistema constructivo a base de polímeros reciclados rellenos de material orgánico natural, gravas y arenas para realización de estructuras portantes de carga en la construcción de edificios (figura 2).
Prefabricados de paja: Sistema de colocación de muros perimetrales y vestíbulos pre-fabricados con estructura de madera y bloques/pacas de paja para cama, comúnmente se utiliza la cebada.
Lamentablemente estos sistemas se utilizan en su mayoría en zonas rurales, lugares donde la mancha urbana no es un problema tal como en las grandes urbes donde toneladas de CO2 son emitidos por la industria de la construcción al utilizar técnicas constructivas estandarizadas (Zalbaza, et al. 2011).
Los arquitectos, ingenieros, investigadores y desarrolladores, tal cual lo menciona Algorri (2009), tienen la responsabilidad de investigar, desarrollar y crear materiales y sistemas constructivos ecológicos que reduzcan a gran medida el impacto ambiental que conlleva el sector de la construcción. Pues como lo mencionó el hoy famoso arquitecto catalán Antoni Gaudí:
«El arquitecto del futuro se basará en la imitación de la naturaleza, porque es la forma más racional, duradera y económica de todos los métodos».
La construcción natural es en este momento una tendencia hacia la vivienda sustentable (Maldonado et al., 2001),lo que propone un equilibrio entre la necesidad de refugio del hombre en relación con su entorno, pero sobre todo a elementos que detonen sostenibilidad, es decir, ir un paso adelante de lo que se creía era necesario hace algunos años, se sostenía que el ahorro de los recursos no renovables y energéticos nos llevarían hacia la sustentabilidad; y eso por mucho no ha sido así, es ahora cuando se debe de preocupar cómo es que retribuimos al ecosistema una vez realizada la actividad humana que es en este caso de estudio la industria de la construcción, tal cual lo logra resolver el bioconstructor Jorge Belanko en su video documental “ El barro, las manos, la casa”.
La re inclusión de la tierra como elemento constructivo ha ocurrido simultáneamente en varios continentes, sobre todo en aquellos donde el empleo de las técnicas vernáculas fue intenso. En Sudamérica, se perciben movimientos de rescate de esas tradiciones a través de la formación de profesionales y técnicos en el manejo de los métodos constructivos naturales, esto, con enfoque en la conservación del inmenso acervo arquitectónico y también para la construcción de viviendas sustentables de interés social (Rodriguez, 2007).
Es además en nuestros tiempos una tendencia necesaria en el ámbito de la investigación, pues con mayor frecuencia nos preocupamos por sobrellevar un estilo de vida sostenible procurando los recursos, preocupándose, pero sobre todo aportando del conocimiento humano para resolver la huella que va dejando.
A continuación, se mencionan proyectos de investigación que marcan una tendencia hacia este estilo de vida autosuficiente utilizando elementos tal cual son extraídos de la naturaleza, parámetro establecido en las edificaciones realizadas con construcción natural, muchos de ellos acelerando procesos existentes, mejorando los materiales y/o creando nuevas tecnologías sostenibles:
En México, la mayor parte de investigaciones se hacen basados al elemento constructivo básico que mayormente se ha utilizado hasta nuestros días: “el adobe”, este material es un elemento constructivo hecho de una masa de barro (arcilla y arena) mezclada con paja o en ocasiones excremento de animal, moldeada en forma de ladrillo y secada al sol; que por su capacidad térmica es utilizado en lugares cuyo clima es templado, semifrío, o extremos tanto en invierno como en verano según la investigación en el artículo del Dr. Everardo Hernández.
Sin embargo, este material se ha realizado hasta el momento de forma artesanal, con un alto peso específico lo que lo hace pesado, que aunque cumple con los estándares, requiere de sumo cuidado al momento de diseñar ya que por su composición térrea trabaja bien a compresión pero falla a la tensión.
La idea surge al desarrollar una alternativa ecológica de block, como elemento constructivo básico con materiales naturales biodegradables que reduzcan a gran medida el impacto ambiental negativo de los sistemas constructivos estandarizados, y que al mismo tiempo comparado con el adobe o el sillar, sea un block de bajo peso específico, mediante el diseño y uso de materiales que logren un elemento constructivo más aligerado comparado también con bloques industrializados como el block comercial de cemento, logrando una densidad menor o igual a 850kg/m3 (densidad promedio de dichos materiales).
Diseñar un block accesible para todos, facilitando a la gente a fabricar sus propios materiales de construcción, y acercando a los grandes desarrolladores estos métodos constructivos para lograr una fabricación local que mitigue las emisiones de CO2 producidas durante su fabricación y transporte de materiales, evite la sobre explotación de los recursos y reduzca los costos de flete y costo por tiempo de construcción en mano de obra. Con esto, lograr que todos los ciudadanos, cualquiera sea su condición económica, puedan optar por esta alternativa constructiva en beneficio del ser y su entorno.
Como fin último, se pretende profesionalizar mediante datos medibles las ventajas que conlleva la utilización de técnicas constructivas naturales en comparación con los sistemas estandarizados utilizados en la industria de la construcción en nuestro país.
MATERIALES Y MÉTODOS
Se realizó un estudio de usabilidad del block de paja-arcilla como un elemento constructivo básico utilizando el modelo Design Thinking.
Se realizó un monitoreo sobre los diferentes usos de materiales con sistemas constructivos similares existentes en el mercado tomando en cuenta al block de paja-arcilla aligerado como un elemento básico de uso constructivo para muros estructurales, muros divisorios y bardas perimetrales.
Se realizaron métodos de análisis para obtener resultados más certeros dirigidos al mercado meta: Bioconstructores y Construcción estandarizada de este modo se pretende obtener un diseño de producto basado en el usuario. Para ello se utilizaron los siguientes métodos:
Método de indagación:
Aproximación contextual: se realizaron diferentes encuestas en obra, para conocer sobre la tendencia de la utilización del block en la construcción, así́ como la incorporación de materiales naturales como el barro y la paja, de esta manera, se estudió la aceptación y el proceso de adaptación del producto en el mercado de la construcción y bioconstrucción.
Generación de Ideas: Se realizaron diferentes pruebas mediante dinámicas contextuales e interactivas que indaguen las diferentes formas pudieron adaptarse a una construcción con block más accesible y funcional, de y para el usuario, esto para generar nuevos moldes y tamaños según las aplicaciones que se requieran en obra como lo pueden ser: bajadas de cargas intramuros, instalaciones eléctricas, bajadas hidrosanitarias, etc.
Método de inspección:
Se recurrió a Bioconstructores con experiencia en el ramo que dicten con un conocimiento previo de los materiales naturales y su comportamiento la forma en que se puede optimizar el diseño tanto para la producción inicial, así como reingenierías concurrentes. Resultados que se enriquecerán con la investigación mercadológica de los principales competidores existentes sacando un estudio del por qué los constructores prefieren ciertos bloques en lugar de otros.
Una vez definido el sistema constructivo utilizado se retomaron los diferentes materiales constructivos básicos prefabricados como estándares con mayor uso, el block y el panel, en este caso se implementaron los estándares del block por ser un producto de fácil maniobra y eficacia como sistema constructivo completo tomando en cuenta su clasificación según sus perforaciones: macizos, semimacizos o huecos y, estos últimos, en ladrillos de perforación vertical o de perforación horizontal, si los ejes de las perforaciones son paralelos a la unidad (PH) o perpendiculares a la cara en la que se asientan (PV) tal como se observa en la ilustración 3.
Con ello se tomaron los valores existentes que en México regulan las calidades de los bloques como sistemas constructivos estandarizados los cuales dependen del tipo (diseño estructural) de elemento como lo representa la norma mexicana N-CTM-2-01-001/02 para boques constructivos.
Optimización del diseño:
Se recurrió a la Permacultura como una metodología de diseño que busca la creación de asentamientos humanos sostenibles (Burnett, 2010).
“El diseño consciente de paisajes que imitan los patrones y las relaciones de la naturaleza, mientras suministran alimento, fibras y energía abundantes para satisfacer las necesidades locales. Las personas, sus edificios y el modo en que se organizan a sí mismos son fundamentos de la permacultura. De esta manera la visión de la Permacultura como agricultura permanente o sostenible ha evolucionado hacia la visión de una cultura permanente o sostenible” (Holmgren, 2007).
Se analizaron y compararon diferentes métodos de la elaboración de materiales de construcción natural con barro tal cuales fueron el COB, la quincha, el tapial, el encofrado y el bajareque, sistemas constructivos descritos anteriormente, con la finalidad de lograr un sistema compacto que incluya al barro y las fibras naturales como componentes principales; estos a su vez deberán adaptarse a la forma contenedora final la cual consiste a base de block.
Una vez definido el sistema constructivo se realizaron prototipos, que al comparar el diseño de otros bloques constructivos estandarizados el diseño logre competir con sus similares comercializados de forma industrial y los que se fabrican de forma artesanal. Para esto, se hicieron prototipos con diferentes proporciones y medidas previamente estudiadas, las cuales se registraron en una bitácora para así después poder alterar y combinar cantidades y proporciones que nos dieron como resultado un diseño de block de paja-arcilla estándar regulando la densidad y las dimensiones.
Mapeo y caracterización de los materiales
Para la arcilla, se realizaron sondeos de cuencas, represas y bordos mediante una investigación que arrojó información de desazolve para la obtención de barro puro como material óptimo dictado por el conocimiento empírico para la composición de la mezcla.
Se llevaron a cabo ensayos de sedimentación y granulometría para determinar las propiedades de arcilla obtenida en los diferentes puntos de extracción previamente seleccionados, teniendo como base el conocimiento empírico del uso en sistemas de construcción con barro como el bahareque, el cob, el encofrado o la quincha, así como calidad de materiales agregados conforme a normatividad ASTM C 144 en el caso de agregados naturales requeridos como la arena.
Se realizaron estudios de biodegradabilidad a cada uno de los componentes del prototipo de block, que consiste en la conversión metabólica del material composteable.
Se midió con un método de prueba estándar UNE-EN-14046-2003 (publicado también como ISO 14885. Biodegradabilidad en condiciones de compostaje controlado). El nivel de aceptación es igual a 90% y se tiene que alcanzar durante menos de 6 meses.
RESULTADOS
La tierra se extrajo de la comunidad Pie de Gallo, del municipio de Querétaro. Para ello se recurrió a verificar las condiciones de la tierra mediante mediciones de sedimentación y granulometría ya que es de suma importancia tomar en cuenta la cantidad de barro, arena y residuos orgánicos que contiene como se explica en la figura 4:
La tierra que se obtiene de dichos bancos se conoce comúnmente como tierra limo, aunque como lo vemos en el análisis de la figura anterior este elemento representa tan solo el 35%, en realidad, el limo por definición es un sedimento clástico incoherente transportado en suspensión por los ríos y por el viento, que se deposita en el lecho de los cursos de agua o sobre los terrenos que han sido inundados. Para que se clasifique como tal, el diámetro de las partículas de limo varía de 0,0039 mm a 0,0625 mm.
Una vez realizada la mezcla tierra- agua, se realizaron pruebas de viscosidad para optimizar las proporciones y así posteriormente incorporar la fibra, para esta investigación se utilizó paja de cebada, ya que es una de las más comunes en nuestro país y que llega a tener un periodo de siega de hasta 6 meses l que lo hace accesible y de bajo costo; este tipo de fibras (cereales) contienen una capa semi-permeable la requiere de un proceso de revoltura constante para poder hidratarse por completo y y así lograr absorber la mezcla del barro la cual funciona como elemento aglutinante, y una vez seco, soporta los esfuerzos a compresión. La proporción optimizada para este tipo de tierra fue de 40%-60% en relación tierra – agua. Una vez encontrada la proporción se pasó a la homogenización de la mezcla, esta se dejó fermentar por un periodo de 48 horas el cual al obtener la muestra en probeta logró una deshidratación por condiciones climáticas naturales del 8% al 10 % que para el mes de junio presentaba temperatura promedio de 28ºC; la fermentación crea una estructura de descomposición de los elementos orgánicos del limo el cual representa el 35 % del total de la proporción de la tierra, lo que a su vez representa el 14% del total de la mezcla homogenizada.
Para este proceso se logra una aglutinación semi-seca, es decir, aunque la plasticidad de la mezcla tendió a ser acuosa, después del proceso de fermentación al adherirse a la fibra, esta comienza a absorber al agua impidiendo que la mezcla escurra tal cual lo muestra el inciso a) de la figura 6, en la cual se recurrió a una prueba de “guante” realizada comúnmente por los bioconstructores para las primeras pruebas de viscosidad.
El resultado de la Metodología de diseño basada en el usuario para trabajadores de obra fue la utilización de bloques con dimensiones superiores a los estandarizados ya que, comparando con elementos constructivos grandes que existen en forma de block, como el silla, suelen tener un avance significativo en obra cuando se trabaja a destajo, en cuanto a los bioconstructores, una vez realizada la mezcla, el encofrado es de las técnicas más sencillas y prácticas, sin embargo, la incorporación de un block prefabricado se disminuye el tiempo, pues elimina todo el trabajo que implica el uso de cimbra. En comparación con el sillar que por su tamaño, como material estandarizado y que a su vez es considerado un elemento constructivo natural, suele ser muy pesado, por lo tanto se recurrió a la incorporación de la técnica constructiva natural llamada encofrado mencionada en la introducción de este artículo, la cual es una técnica constructiva aligerada con la variación de cimbrarla de tal manera se pudiera obtener un block ya que es este uno de los sistemas constructivos estandarizados que más se utiliza en México. Para ello so obtuvieron las siguientes medidas (figura 7):
Además de la función que tienen los espacios huecos del block para su secado en posición diagonal, estos aportan un aislamiento extra térmico-acústico al ser espacios de aire dentro del sistema de levantamiento de muros, además de cumplir con la función estructural para refuerzos verticales y ductos de instalaciones eléctricas e hidrosanitarias.
Una vez realizada la optimización del diseño se compara con la norma mexicana N-CTM-2-01-001/02 para bloques constructivos, esto con la finalidad de conocer los grados de calidad y requerimientos según los usos y condiciones climáticas, teniendo como resultado la siguiente tabla:
En relación a esta tabla, tomando en cuenta el grado de calidad B-C-D para bloques perforados, se tomó en cuenta el uso recomendable de este sistema constructivo según lo marca la norma N-CTM-2-01-001/02 según el clima, sistema estructural y función:
Para las pruebas de biodegradabilidad se crearon dos sistemas de biocomposta, uno mediante un sistema orgánico de descomposición de las excretas producida por las lombrices, en el caso de nuestra experimentación “californianas”, las cuales mediante el proceso digestivo descompusieron una porción del 30% del material que compone el block de paja arcilla en un periodo de 17 semanas en ambiente natural y en un periodo de 12 semanas en un ambiente controlado recuperando el lixiviado de lombriz para acelerar el proceso.
Analizando el material de trabajo se sacaron rendimientos para el agregado de fibra natural como lo fue en el caso del desarrollo de los prototipos la cebada, para ello se compraron pacas de paja de .90 x .40 x .50 mts los cuales contenían:
Esto transformándolo en términos monetarios para el mes de julio resultó de una paca que tiene un costo promedio de $20 MXN el cual representa un costo de materia prima de fibra natural (que es el recurso de mayor costo económico) de $2 MXN por block.
En cuanto rendimiento se comparó con una construcción con muros de pacas completas de paja de 50m2 de construcción, el cual se realizó para este experimento en la comunidad de Tenazdá, municipio de Amealco, de la cual se tuvieron los siguientes resultados:
Para la densidad, se pesaron los diferentes prototipos realizados durante la experimentación, esto para comparar su peso específico y de esta manera tener resultados que demuestren que el block de paja-arcilla trabaja como un sistema constructivo aligerado, compitiendo con el sistema constructivo natural más común en México: el adobe el cual se realizó con las medidas y especificaciones técnicas basadas en la investigación del Dr. Everardo Hernández: “El adobe, ventajas y características térmicas”.
CONCLUSIONES
El block de paja arcilla resultó ser una alternativa ecológica a los sistemas constructivos estandarizados a base de bloques, ya que cumple con los estándares mínimos admisibles por las características de sus componentes, considerado un producto 100% biodegradable, no es nocivo para la salud y se puede reintegrar al suelo siendo este un producto de reúso inclusive para cumplir con las mismas funciones nuevamente.
Comparándolo con los elementos constructivos naturales existentes en el mercado se logró obtener un producto prefabricado aligerado el cual tiene como consecuencia la disminución de tiempo de obra, pues por su poco peso es más fácil su utilización en sistemas constructivos compitiendo inclusive con materiales que común mente se utilizan en la industria de la construcción como lo es la mayoría de tabiques rojos, o bloques de concreto.
Se espera el costo económico sea competitivo, pues algunos resultados arrojaron que el material principal está por debajo del costo de los agregados de los bloques de concreto. Esto con la finalidad de crear un producto económico, pero sobre todo accesible y disponible en casi cualquier región del país, ahorrando tiempo y costos de flete en obra.
La profesionalización de el encofrado o mejor conocido en nuestro país como paja-arcilla es solo un paso para la profesionalización de los sistemas constructivos naturales, con esto se pretende se abran nuevas investigaciones que desarrollen productos basados en sistemas constructivos ancestrales, pues son la base de una construcción sustentable la que nos llevará a reducir el impacto ambiental que está cosechando el incremento de la mancha urbana por la utilización de materiales contaminantes que son la mayoría, hasta el día de hoy, producidos en la industria de la construcción.
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